Canelones de atún con tomate y bechamel, sencillos y ricos
Ingredientes para 4 personas
- 20 placas de canelones.
- 4 latas de atún en conserva en aceite (escurrido pesa unos 250 g).
- 3 huevos.
- Una cucharadita de vinagre para cocer los huevos.
- 300 g de salsa de tomate (200 g son para el relleno y 100 g para cubrir la bandeja de horno en la que se hornearán los canelones).
- 40 g de aceitunas negras.
- 2 cucharadas soperas de alcaparras o tápenas.
- 1/4 de cucharadita de postre de pimienta negra molida.
- 1 cucharadita de postre de orégano seco.
- Un poco de sal.
- 150 g de queso rallado tipo emmental o mozzarella.
- Para la salsa bechamel casera:
- 500 ml de leche.
- 45 g de mantequilla sin sal.
- 50 g de harina de trigo.
- Un poco de sal y pimienta negra molida al gusto.
Estos canelones son sencillos de preparar y quedan muy ricos. El relleno se complementa con huevo duro, alcaparras y aceitunas que le dan un sabor único y con mucha personalidad y por encima se cubren con una cremosa bechamel casera y una capa de queso gratinado. Aprende cómo cocer y rellenar los canelones en su justa medida y de paso conoce trucos para cocer huevos duros y para preparar una bechamel de 10. A partir de esta receta puedes innovar lo que prefieras y adaptar el relleno a tu gusto.
Preparación, cómo hacer canelones de atún con tomate y bechamel
- El primer paso es cocer los huevos. Pon un cazo u olla con abundante agua a calentar (que los huevos después queden cubiertos por completo), un poco de sal y una cucharada sopera de vinagre, y el fuego a temperatura media-alta para que llegue a ebullición.
- Cuando el agua esté hirviendo introduce los huevos con cuidado en el agua (puedes hacerlo con una cuchara), baja un poco la temperatura del fuego y cuécelos 11 minutos.
- Cuando estén cocidos déjalos en un bol con agua fría, cambiando el agua varias veces si es necesario para que los huevos se enfríen y no se sigan cociendo.
- Mientras se cuecen los huevos puedes empezar a preparar la salsa bechamel. Pon un cazo a fuego suave con la mantequilla y cuando se derrita añade la harina y mezcla bien con unas varillas durante 2-3 para que no se formen grumos y el aspecto sea homogéneo.
- A continuación añade un poco de leche (algo menos de la mitad) a la vez que sigues mezclando con las varillas sin parar. Cuando se haya integrado todo e incluso empiece a espesarse añade otra tanda de leche y cuando vuelva a espesarse incorpora el resto. Suele tardar unos 10 minutos en espesarse, siempre a fuego suave y removiendo con las varillas.
- Añade sal al gusto y también las especias, que en mi caso suelen ser nuez moscada y pimienta negra recién molida.
- Cuando la salsa esté cremosa y con la textura que estés buscando, apártala del fuego. Eso si, ten en cuenta que al enfriarse sigue espesándose un poco más. Pruébala por si tienes que rectificarla de sal.
- Pasamos ya a cocer la pasta. Pon una olla con abundante agua a fuego alto y cuando esté hirviendo échale una cucharadita de postre de sal y las láminas de canelones de una en una. Cuando vuelva a hervir el agua empieza a contar el tiempo que indique el paquete, en mi caso han sido 12 minutos. De vez en cuando acuérdate de removerlos suavemente para que no se peguen entre ellos pero que tampoco se rompan.
- Cuando estén cocidos los canelones pásalos a un escurridor y de ahí ponlos en un bol con agua fría para cortar la cocción.
- Humedece un paño de cocina y, sacando las placas de canelones una a una y dejándolas que escurran un poco, ponlas encima del paño ligeramente separadas unas de otras.
- Mientras se cuece la pasta de los canelones podemos elaborar el relleno, es muy fácil. Pon en un bol 200 g de la salsa de tomate (reservamos 100 g para más adelante) junto con el atún escurrido.
- En otro plato pela los huevos duros y cháfalos con un tenedor para que queden picados de forma irregular, aunque realmente puedes picar o cortar los huevos como más te guste.
- Corta las aceitunas negras en 3 rodajas cada una.
- Añade al bol con el tomate y el atún los huevos duros, las alcaparras escurridas, las aceitunas negras, el orégano, la pimienta negra molida y una pizca de sal. Mézclalo todo bien, procurando que el atún se desmigue.
- Prepara una bandeja de horno para ponerlos todos o bien 4 bandejas individuales y reparte en ellas los 100 g de salsa de tomate que habíamos reservado.
- Reparte el relleno sobre las láminas de canelones, procura que sea una cantidad similar a la que ves en las fotografías para que se puedan enrollar sin problemas y por otro lado que no queden excesivamente vacíos.
- Cierra los canelones enrollándolos sobre su relleno de forma que ambos extremos se superpongan.
- Precalienta el horno a 200ºC con calor arriba y abajo y ventilador.
- Reparte por encima la salsa bechamel. Si al prepararla con antelación se ha endurecido un poco puedes volver a calentarla antes de usarla, ya sea en el cazo o en el microondas, y si se ha espesado demasiado puedes añadirle un poco de leche mientras la calientas.
- Echa por encima el queso rallado.
- Lleva los canelones al horno, a altura media. Hornéalos unos 10-12 minutos o hasta que el queso se dore un poco.
Tiempo: 1 hora
Sirve y degusta
Puedes repartir los canelones en la cocina o directamente sacar la bandeja a la mesa y servirlos ahí, pero si los has horneado en bandejas individuales ponlas delante de cada comensal y no olvides colocar debajo un salvamanteles. Eso si, en este caso recuerda que los canelones mantendrán mucho tiempo el calor así que cuidado con quemarse. Si tienes que dejarlos hechos con antelación no hay problema ya que a la pasta el reposo le sienta fenomenal y si te sobran puedes mantenerlos 2-3 días en la nevera y también congelarlos. Si ves que se han secado un poco siempre puedes añadir un poco de leche al recalentarlos o un poco más de salsa de tomate.
Disfruta de estos deliciosos canelones con un relleno muy sabroso y con textura de lo más apetecible gracias a la salsa de tomate. Además todo ello va coronado con una cremosa bechamel y el fantástico toque del queso dorado en el horno, están de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Si te apetece preparar una salsa un poco más elaborada puedes preparar un sofrito de ajo, cebolla y zanahoria, todo muy picadito y cocinado suave durante unos 10 minutos, y añadirlo al relleno.
También puedes darle un toque muy rico incorporando al relleno unas hojas de albahaca fresca picadas.
Consejos
Puedes congelar los canelones solo a falta de hornearse y verás que quedan como recién hechos. También puedes preparar una buena cantidad de relleno y congelarlo y lo mismo con la bechamel para cuando quieras preparar canelones en un momento. Igualmente el relleno y la bechamel te pueden servir para elaborar platos con otro tipo de pasta o incluso lanzarte a una lasaña.
Para la pasta de los canelones suele haber opción de comprar la pasta para cocerla o bien las láminas precocidas que solo necesitan un tiempo de remojo en agua. Personalmente estas últimas me parecen muy prácticas sobre todo si no queremos encender el fuego y nos apetece preparar unos canelones fríos pero lo cierto es que las láminas que se cuecen quedan con mejor textura e incluso sabor.