Cómo hacer leche de almendras casera. Receta de leche vegetal
Ingredientes para 1 litro
- 150 g de almendras crudas. Yo prefiero peladas, pero se pueden utilizar también sin pelar.
- 800 ml de agua fría.
- Azúcar o endulzante al gusto.
No puede ser más sencilla y el procesidimiento es muy similar a preparar cualquier otra leche vegetal por lo que si te animas a preparar ésta, puedes hacerlo igualmente con otros frutos secos como anarcardos o nueces, y también avena, soja o arroz. Esta bebida por lo general tiene muy buena digestión, es de sabor suave y la puedes endulzar como prefieras. Además me gusta mucho que no se desperdicia nada ya que los restos de pulpa de almendras que quedan en el colador puedes utilizarlos como si fuera harina para sustituirla en postres como bizcochos, bases de tartas, galletas o magdalenas por ejemplo.
Preparación, cómo hacer la receta de leche de almendras casera
- Pon las almendras en un bol con agua, que queden completamente cubiertas, y déjalas en remojo al menos 8 horas, aunque lo ideal es que las tengas así un día entero. Mantenlas en la nevera y cámbiales el agua cada 8 horas.
- Vierte las almendras sobre un escurridor, enjuágalas con un chorro de agua y déjalas escurrir.
- Ahora toca triturarlas, para ello puedes utilizar un robot (con 2 minutos a velocidad 7-10 es suficiente), o también una batidora de vaso o una batidora de mano.
- Tritúralas con el agua hasta que se hayan triturado por completo.
- Cuela la mezcla con una malla, gasa, filtro de café… lo que te pueda servir para colarla sin dejar escapar ningún grumo.
- Aprieta bien para que salga todo el líquido, y pon la leche resultante en una botella en la nevera, te aguantará 2-3 días.
- ¡Truco! No tires la pulpa que ha quedado en el colador, puedes utilizarla como si fuera harina para sustituir parte de la harina de otras recetas de repostería como bizcochos, magdalenas, galletas o bases para tartas. Yo suelo congelar la pulpa y cuando tengo una buena cantidad, la utilizo para preparar ese tipo de recetas.
Tiempo: 20 minutos y 24 horas antes en remojo
Sirve y degusta
Está riquísima fresquita, aunque puedes servirla también a temperatura ambiente. Puedes ponerle o no endulzante, el que más te guste, y si crees que no la vas a consumir en los 2-3 días que dura, simplemente congélala y así la tendrás a mano siempre que quieras, está de… ¡escándalo!
Variaciones
La receta en sí admite pocas variaciones, y lo único que puedes hacer es añadir más o menos agua para cambiar su densidad. Eso si, una vez lista puedes añadirle cacao en polvo, canela en polvo, extracto de vainilla o cualquier otro aromatizante que se te ocurra para dejarla a tu gusto.
Consejos
Si quieres prepararla y consumirla muy fría prácticamente en el momento, sustituye la mitad del agua por cubitos de hielo, de esa forma podrás servirla nada más hacerla y estará perfecta para un desayuno o merienda cuando el calor aprieta.