Galletas de Navidad de mantequilla y decoradas. Receta paso a paso
Ingredientes para 50-60 galletas
- 300 g de harina de trigo.
- 100 g de azúcar glas.
- 150 g de mantequilla sin sal.
- 1 huevo M.
- 1/2 de cucharadita de postre de esencia de vainilla.
- Una pizca de sal.
- Para la glasa real o glaseado para decoración:
- 1 clara de huevo (la que yo he usado pesaba 38 g).
- 200 g de azúcar glas.
- 3 gotas de zumo de limón.
- Además, para decorar he utilizado surtidos navideños de sprinkles o figuritas de azúcar.
Se preparan de forma muy sencilla si sigues el paso a paso de la receta. Necesitan pocos ingredientes, la masa es muy fácil de manejar y la mejor parte es cortarlas con los cortadores que más te gusten y por supuesto decorarlas.
Con tan solo unos pocos minutos de horno quedan crujientes y ligeramente doraditas, con un fantástico aroma a mantequilla que inunda toda la cocina. Sigue los consejos y recomendaciones de la receta para decorarlas de forma sencilla, sin duda una tarea fantástica y divertida para hacer con los peques de la casa.
Preparación, cómo hacer galletas de Navidad de mantequilla
- Saca la mantequilla de la nevera al menos 1 o 2 horas antes para que esté en pomada, es decir, cremosa pero sin llegar a derretirse. Por si no te has acordado de hacerlo pártela en cubitos pequeños como he hecho yo y déjala media hora a temperatura ambiente para que se ablande un poco o, si tienes prisa, introdúcela en el microondas en modo descongelar en tandas de 10 segundos hasta que esté un poco blanda pero lo dicho, sin llegar a derretirse ni volverse líquida.
- Para preparar la masa te recomiendo utilizar utilizar un robot con el accesorio pala aunque también puedes usar unas varillas eléctricas, lo que prefieras.
- Mezcla bien la mantequilla con el azúcar glas y una pizca de sal hasta que la mezcla sea homogénea y tenga un color amarillo clarito.
- Incorpora el huevo y la esencia de vainilla y sigue mezclando. No es necesario batir la masa, solo que se mezcle bien.
- Encima del bol pon un colador y echa en él la harina para tamizarla y que caiga sin grumos. Para eso ve moviendo el colador de un lazo hacia otro, haciéndolo chocar con tu otra mano para que vaya cayendo la harina.
- Mezcla bien todos los ingredientes y, si lo haces con varillas manuales, cuando la masa empiece a estar dura sigue mezclándola con tus propias manos. No se trata de amasar sino simplemente de mezclar hasta obtener una masa homogénea y dura.
- Para saber si está lista, si puedes hundir mucho tus dedos en ella es que le falta un poco de harina pero si ya está suficientemente compacta estará perfecta.
- Envuélvela en papel film y déjala en la nevera 1 hora para que se enfríe bien.
- Ve preparando sobre la encimera un trozo de papel vegetal sobre el que extender la masa y otro para hornearlas, además del rodillo de cocina y los cortadores que vayas a utilizar. En mi caso han sido varias estrellas, una hoja de muérdago y un árbol de Navidad.
- Además ya puedes precalentar el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
- Saca la masa de la nevera, divídela en dos partes y deja una cerrada de nuevo con el papel film en la nevera.
- Pon la mitad que te has quedado sobre el papel vegetal y estírala con un rodillo hasta que esté finita, de unos 3 mm aproximadamente. Lo habitual es que no se pegue pero por si te ocurre puedes echarle un poco de harina por ambos lados y seguir estirándola.
- Utiliza los cortadores para cortar las galletas con las formas elegidas. Es importante que este paso lo hagas rápido porque las galletas deben ir lo más frías posible al horno para que queden crujientes.
- Ve poniéndolas sobre el otro papel de horno y este sobre una bandeja de horno, así hasta completarla y sin que estén pegadas unas con otras ya que durante el horneado crecen un poco.Quita la masa sobrante de alrededor y reaprovéchala uniéndola con tus manos, estirándola de nuevo con el rodillo y cortando galletas hasta terminarla.
- Introduce la bandeja a altura media y hornéalas unos 8-10 minutos. Te recomiendo vigilarlas porque hay que sacarlas en cuanto los bordes empiecen a dorarse un poco ya que de lo contrario podrían pasar de doradas a quemadas en muy poco tiempo.
- Saca la bandeja con las galletas del horno, espera 5 minutos y cuando puedas cogerlas déjalas enfriar sobre una rejilla para que no se humedezcan y queden crujientes. Mientras sigue estirando y horneando la otra tanda de galletas.
- Para decorarlas hay que esperar a que se enfríen completamente, por eso yo suelo hacerlo al día siguiente.
- Para preparar la glasa en un bol pon la clara de huevo y con unas varillas (mucho mejor si son eléctricas) bate hasta que estén a punto de nieve, es decir, blancas y espumosas y si pones el bol boca abajo no se caen.
- Incorpora las gotas de zumo de limón y sigue batiendo un minuto más.
- Añade el azúcar glas y mezcla hasta que quede una crema homogénea, puedes hacerlo en dos tandas por ejemplo.
- La consistencia apropiada es firme, que mantenga la forma y cuando levantes las varillas le cueste escurrir.
- Pon la glasa en una manga pastelera con una boquilla redonda muy pequeña o en alguna herramienta de decoración similar, yo he utilizado un lápiz que es muy fácil de utilizar por los peques.
- Decora las galletas como prefieras, en esta ocasión hemos hecho diversos dibujos con glasa por encima y los hemos rematado con sprinkles variadas, sobre todo bolitas de colores, copos de nieve y hojas de acebo.
Tiempo: 25 minutos más 1 hora de reposo y el tiempo de decoración
Sirve y degusta
No tienes más que esperar a que se enfríen para empezar a probarlas y si las decoras la glasa se seca enseguida así que también podrás probarlas decoradas al poco de terminarlas. Para guardarlas déjalas en un recipiente cerrado a temperatura ambiente, aguantan como mínimo 1 semana y siguen crujientes como el primer día.
Son unas galletas ideales para tener en casa en Navidad, para regalarlas o incluso para colocarlas en el árbol como decoración (y por supuesto ir comiéndolas durante los días navideños). Quedan crujientes y fantásticas con el glaseado y las figuritas de azúcar, con su característico sabor a mantequilla y un toque aromático de vainilla, sin duda de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Si le prestamos atención al sabor, a esta masa básica de galletas de mantequilla le podemos añadir chips de chocolate, frutos secos tostados y picados, semillas, ralladura de cítricos o un poco de canela o cardamomo. Piensa que puedes mezclar algunos de ellos con toda la masa o bien dividir la masa previamente en 2 o partes por ejemplo, mezclar cada parte con un ingrediente diferente y usar un cortador diferente para cada porción, así conseguirás estrellas con chocolate, árboles con semillas de sésamo u hojas de acebo con aroma de limón, por ejemplo.
En cuanto a la decoración se abre un mundo de posibilidades. La glasa puedes dividirla y tintarla con colorantes alimentarios para dar rienda suelta a tu creatividad, colocando cada color en una manga pastelera diferente. Y si quieres colgarlas en el árbol de Navidad tan solo tienes que hacerles un agujerito con una pajita o un palito antes de hornearlas para después poder ponerles una cinta o cordón.
Consejos
La decoración no es complicada pero la experiencia y sobre todo contar con las herramientas adecuadas hace mucho. Lo ideal es una manga pastelera con una boquilla redonda y muy finita pero también se puede utilizar algo tipo lápiz como el mío, ideal cuando son los peques los que van a encargarse de esta tarea.