Lubina a la sal con pisto. Receta de pescado al horno muy fácil y rica
Ingredientes para 4 personas
- 2 lubinas de tamaño medio o una grande. Yo para dos personas he utilizado una lubina que pesaba unos 500 g y en las fotografías podéis ver lo que daba de sí. En tu pescadería pide que no le quiten las escamas y que la limpien un poco por dentro pero con la menor abertura posible.
- 1-2 kg de sal gruesa. Yo siempre utilizo una que venden especial para horneado y que se encuentra fácilmente en los supermercados.
- Para aliñar el pescado con aceite de oliva virgen extra y un poco de sal tenéis suficiente. Yo personalmente he preparado un aceite más aromatizado con estos ingredientes (cantidades al gusto, te recomiendo ir probándolo):
- Un diente de ajo.
- Unas hojas de albahaca.
- Un poco de zumo de lima.
- Aceite de oliva virgen extra y sal.
- Como guarnición puedes preparar mi receta de pisto manchego o unas patatas al horno pero puedes acompañar el pescado con lo que prefieras.
Es una de esas recetas de pescado al horno que más suelo preparar porque el resultado de esta técnica bien merece la pena ya que no hay fallo, el pescado queda jugosísimo y lleno de sabor y además se puede preparar solamente una lubina o bien llenar el horno y de una vez preparar platos para mucha gente. Lo de «a la sal» consiste en crear una capa gruesa de sal alrededor del pescado para que se hornee en su interior y así conservar al máximo su jugosidad.
Preparación, cómo hacer la receta de lubina a la sal
- Precalienta el horno a 220ºC con calor arriba y abajo y ventilador.
- Lava las lubinas bajo un chorro de agua fría y sécalas con papel de cocina.
- Utiliza una bandeja de horno de tamaño similar a las lubinas o un poco más grande, y si lo prefieres fórrala con papel de horno.
- Coloca una cama de sal gruesa un poco más amplia que el tamaño de las lubinas y aplástala un poco para que quede compacta.
- Coloca encima las lubinas y vuelve a echar sal gruesa por encima, compactándola poco a poco con tus manos y asegurándote de que quedan perfectamente cubiertas a excepción de unas partes que nos van a servir de truco para saber si las lubinas están listas:
- Puedes hacer un hueco en la sal justo donde se encuentre algún ojo de las lubinas porque así puedes comprobar si están totalmente cocinadas, ya que el ojo se volverá más amarillo y opaco (lo podrás ver en la foto de más abajo). Aún así, guiándote solamente con los tiempos puedes conseguir una cocción perfecta.
- También puedes dejar la cola al descubierto y, cuando haya pasado el tiempo de horneado, tira un poco de ella y si puedes moverla sin apenas dificultad, la lubina ya está lista.
- Introduce la bandeja en el horno y deja que se horneen unos 15 minutos las que pesen como la mía, en torno a medio kilo (cada una), 25 minutos para las que sean de 1 kg… ve aumentando 5 minutos de horneado más por cada 250 g de pescado.
- Pasado el tiempo de horneado saca la bandeja del horno, haz la prueba del ojo o la cola y si todo indica que están listas, procede a retirar la sal. Lo más útil es golpearla un poco con la punta de un cuchillo o incluso una cuchara y verás que la sal va saliendo en trozos. Hazlo hasta que el pescado esté totalmente descubierto y puedas arreglarlo.
- Aquí podrás ver el aspecto del ojo una vez horneadas e indica que están perfectamente cocinadas.
- Te recomiendo colocar las lubinas en un plato aparte para retirarles la cabeza y la cola, la raspa y las posibles espinas que pueda tener (suele haber algunas bastante grandes cerca de la zona de la cabeza, despréndelas de la piel y sírvelas en los platos con el aliño y guarnición que hayas elegido.
Tiempo: 50 minutos
Sirve y degusta
Lo ideal es servir recién hechas y calientes estas riquísimas lubinas con la guarnición que hayas elegido (que deberás haber preparado previamente o a la vez), así que te recomiendo limpiarlas de forma rápida una vez horneadas para que no pierdan demasiada temperatura. También te doy un consejo, si sois muchos comensales quizás no te merezca la pena limpiar las lubinas, simplemente coloca cada mitad en el plato de un comensal y que sea él mismo quien retire la raspa y espinas y la piel.
Cuando el pescado esté totalmente limpio en los platos añade el aliño por encima o, como te decía, un chorrito de aceite de oliva virgen extra, un poco de sal y si lo prefieres un chorrito de lima o limón. Es un pescado que si está bien horneado quedará muy tierno y jugoso, está de… ¡escándalo!
Variaciones
La forma de asar a la sal permite pocas variaciones pero sí es cierto que se puede mezclar la sal gruesa con hierbas y especias a tu gusto para darle un toque aromático diferente al pescado mientras se asa. Tomillo, eneldo o perejil son las hierbas más utilizadas y de especias la pimienta le va genial.
Te recomiendo servir este plato con una guarnición o aliño diferente cada vez que lo prepares. Además del pisto y las patatas al horno también puedes servirlo con patatas panaderas, patatas a lo pobre, patatas cocidas al microondas o puré de patatas casero y en cuanto a verduras decántate por unas verduras al horno o verduras a la plancha. En cuanto a las salsas que quedan geniales con pescado, mis preferidas son la salsa de pimientos del piquillo, la salsa tártara y por supuesto un buen alioli casero.
Consejos
Para calcular el tiempo en el horno ten en cuenta lo que pesa una de las lubinas que vas a cocinar (lo ideal es que todas sean de tamaño similar), y ya sabes que para medio kg son 15 minutos y a partir de ahí vas sumando 5 minutos más de horneado por cada 250 g extra.
Si al sacar la lubina y abrirla está prácticamente hecha pero todavía hay alguna parte que necesita de más horno, puedes volver a taparla un poco y hornearla 2-3 minutos más pero también puedes cerrarla de nuevo y esperar 5 minutos, normalmente ese reposo hace que los jugos se asienten y termine de quedar completamente cocinada. Eso si, siempre es mejor quedarse cort@ que no pasarse 😉