Merluza a la gallega con ajada, patatas y guisantes. Receta tradicional
Ingredientes para 4 personas
- 4 patatas de tamaño medio.
- 8 rodajas de merluza (pueden ser más o menos dependiendo de su tamaño).
- 1 cebolla grande.
- 200 g de vainas de guisantes frescos o 100 g de guisantes en conserva o congelados.
- 2 hojas de laurel.
- 4 dientes de ajo.
- 1 cucharadita de postre de pimentón dulce.
- Aceite de oliva y sal.
Todo un clásico y además una receta muy fácil de preparar, en la que la la diferencia la marca contar con pescado fresco de calidad para conseguir el mejor resultado. El acompañamiento es muy sencillo, unas patatas cocidas, cebolla también cocida y en gajos y unos guisantes, y lo que termina de aportarle personalidad al plato es la famosa ajada, una mezcla de ajos, aceite y pimentón que adereza el plato de forma fantástica.
La clave está en cocinar los ingredientes el tiempo que necesitan (en la receta encontrarás todos los detalles) y en conseguir una ajada sabrosa con los ajos dorados pero sin que se queme el pimentón (también verás un truco para eso). La merluza queda tiernísima y se deshace en la boca, y el resto de ingredientes la acompañan fenomenal.
Cómo hacer la receta de merluza a la gallega con ajada, patatas y guisantes
- Comienza sacando los guisantes de sus vainas y retira la protuberancia que hacen que estén cogidos a la vaina. Cuando se la quites verás que quedan perfectamente redondos.
- En una olla pon agua hasta la mitad y el fuego medio-alto y cuando esté hirviendo añade los guisantes y deja que se cocinen 10 minutos. Puedes comer alguno (con cuidado de no quemarte) para comprobar si están tiernos. Sácalos con una espumadera y resérvalos.
- Pela las patatas y córtalas en rodajas gruesas de aproximadamente 1,5 cm de grosor.
- Pela la cebolla.
- Pon abundante agua en una olla grande a fuego fuerte y cuando esté hirviendo echa las patatas junto con la cebolla, las hojas de laurel y un poco de sal. Baja el fuego para que esté suave pero que siga borboteando un poco y cocínalas unos 15 minutos.
- Añade las rodajas de merluza y cocínalas 5 o 6 minutos más. Cuando dejen de verse crudas estarán listas.
- Mientras tanto vamos a preparar la ajada. Pela los dientes de ajo y córtalos en rodajas finas.
- Cubre el fondo de una sartén con aceite, echa los ajos también y pon el fuego suave. Ve cocinando los ajos moviéndolos y dándoles la vuelta hasta que estén dorados.
- Aparta la sartén del fuego, añade el pimentón dulce y mezcla.
- Incorpora un poco del caldo de la cocción (3 o 4 cucharadas soperas) a la sartén y vuelve a ponerla a fuego suave 2-3 minutos.
- En cuanto estén listas las patatas y la merluza ve sirviendo en un plato al centro o directamente en los platos de los comensales las patatas. Corta la cebolla en gajos y distribúyela junto con los guisantes. Por último coloca sobre las patatas las rodajas de merluza y por encima vierte la ajada, que riegue bien todos los ingredientes.
Tiempo: 40 minutos
Sirve y degusta
Es un plato que mejor no preparar con antelación porque corres el riesgo de que, si dejas los ingredientes en la olla, se sobrecuezan y no queden bien, de hecho es muy posible que las patatas se deshagan, y como debe llegar bien caliente a la mesa lo ideal es que tengas todos los ingredientes preparados (incluso la ajada) y justo antes de servir lo cuezas todo.
La merluza así preparada es una delicia porque queda tiernísima y prácticamente se deshace en la boca. Las lascas se separan con gran facilidad y es sencillo retirarle tanto la piel como las espinas ya que solamente están presentes en la cruz central y muy unidas. Con la ajada por encima y ese fantástico acompañamiento de tiernas patatas, cebolla y guisantes es un plato que está de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Se trata de una receta tradicional que tiene pocas variaciones, quizás la más común es utilizar o no guisantes, e incluso cambiar el pimentón dulce por pimentón picante.
Añadir unas almejas abiertas al vapor aparte alegra mucho el plato y también puedes espolvorear un poco de perejil por encima.
Consejos
La merluza no es un pescado de los más económicos, sobre todo si es fresca. Congelada si que resulta más asequible pero suele quedar un poco más reseca y también es posible que se desmigue más, y la otra opción es hacerte con una pieza fresca que sea más económica, ya que normalmente en las pescaderías si te llevas el pescado entero, medio o la zona de la cola suele tener mejor precio.
La cocción de las patatas depende de su grosor y acertar con el tiempo no siempre es posible así que si después echas la merluza y por lo que sea ves que las patatas ya están listas pero a la merluza aún le falta un poco, ve sacando las patatas con unas pinzas de cocina o similar a un plato para evitar que se sigan cociendo y empiecen a deshacerse.