Rosbif o roastbeef al horno, un asado de ternera exquisito
Ingredientes para 6-8 personas
- 1 pieza de ternera de entre 1,2 y 1,5 kg. Una de las piezas más deliciosas para prepararlo sería el lomo alto que es el chuletón pero sin hueso y también fantástico es el lomo bajo que solemos conocer como entrecot. Yo en este caso he utilizado un entrecot de novillo argentino de 1,2 kg. También se puede utilizar cadera de ternera que es más económica pero al no tener apenas grasa su sabor es más suave.
- Para aliñar la carne:
- 2 cucharaditas de postre de mostaza inglesa o francesa.
- 1/2 cucharadita de cada hierba aromática: ajedrea, salvia, tomillo y romero. Puedes utilizar otras hierbas que tengas y en mi caso el tomillo se lo he podido poner fresco ya que tenía, lo demás es seco.
- 1 cucharadita de postre de sal gruesa.
- 1/2 de cucharadita de pimienta en grano.
- Media cebolla grande o 1 cebolla pequeña.
- 5 dientes de ajo.
- Unas ramitas de tomillo fresco.
- Unas ramitas de romero fresco.
- 50 ml de vino tinto.
- 150 ml de vino Pedro Ximénez (50 para cocinar con sus jugos y 100 para el paso final de la salsa).
- 250 ml de agua (150 ml para la bandeja del asado y 100 ml para el paso final de la salsa).
- Un poco de maicena por si se necesita espesar la salsa.
- Aceite de oliva y sal.
- Hilo de bridar.
- De guarnición he preparado un sencillo puré de patatas casero decorado con un poco de perejil fresco picado.
Un asado de ternera exquisito y que se prepara de forma muy sencilla. Conseguirás una carne en su punto, con un aliño fantástico y una salsa con sus jugos que no puede estar más rica.
Eso si, para preparar esta receta es fundamental tener una sonda en tu horno o termómetro de carne porque solo así se puede saber a qué temperatura está el interior de la pieza y ese dato es necesario para que quede en el punto que más nos guste. Además en la sección de Ingredientes conocerás qué cortes de ternera se pueden utilizar para preparar este asado y podrás ir a la receta del puré de patatas cremoso con el que he acompañado la carne.
Preparación, cómo hacer la receta de rosbif o roastbeef al horno
- Saca la pieza de ternera de la nevera al menos una hora antes de cocinarlo e idealmente 2 horas para que esté a temperatura ambiente.
- El primer paso es bridar la carne y es muy sencillo. Rodea la pieza de carne y hazle un nudo al hilo.
- A continuación coge el hilo, dale una vuelta completa de forma que te «atrape» los dedos.
- En la siguiente fotografía puedes ver en detalle cómo queda.
- Vuelve a poner tus dedos dentro del círculo de hilo, colócalos en el borde de la pieza y haz que ese círculo de hilo ahora rodee la carne. Ve pasándolo hasta la altura en la que quieras dejarlo y tira de él para que quede apretado.
- Haz lo mismo varias veces hasta tener toda la carne atada. Cuando hayas terminado haz un nudo y listo.
- Mezcla en un recipiente los ingredientes del aliño de la carne: la mostaza, la ajedrea, la salvia, el tomillo y el romero (si alguna es fresca quédate solo con las hojas). Además machaca en un mortero la sal gruesa con la pimienta negra y cuando la pimienta esté partida en trozos (no hace falta picarla mucho) añade la mitad de la mezcla al recipiente.
- Mezcla con una cuchara los ingredientes y ya lo tenemos listo.
- No peles los ajos y simplemente aplástalos con la hoja del cuchillo para que queden un poco chafados y abiertos.
- Pela la cebolla y córtala en tiras finas.
- Precalienta el horno a 200ºC con calor arriba y abajo.
- Pon una sartén a fuego medio con un poco de aceite de oliva y cuando esté caliente coloca encima la carne. Cocínala un par de minutos sin moverla y entonces gírala un poco para seguir sellando el resto de su superficie. Además al final ponla pieza en vertical para sellar los extremos. Resérvala en un plato aparte.
- Ahora incorpora a la sartén los ajos y la cebolla y cocínalos a fuego alto 3 o 4 minutos para que se doren un poco, aprovechando la grasa y jugos que ha soltado la carne.
- Añade las ramitas de tomillo y romero fresco y cocina otro minuto más mientras remueves de vez en cuando con una paleta de cocina.
- Incorpora los 50 ml de vino tinto y 50 ml de vino Pedro Ximénez, cocina 2 minutos y apaga el fuego.
- En la bandeja de horno que vayas a utilizar, que solo tiene que ser un poco más grande que la pieza de carne, vierte el contenido de la sartén y añade 150 ml de agua.
- Coloca encima una rejilla y sobre esta la carne. Píntala con el aliño con la ayuda de una brocha de cocina por todos sus lados, que quede completamente cubierta.
- Reparte por encima de la carne lo que nos quedaba de sal gruesa y pimienta negra machacadas con el mortero.
- Como le habrás dado varias vueltas a la carne para aliñarla finalmente déjala con la zona que más grasa tenga arriba.
- Pincha la carne con la sonda de tu horno o un termómetro de carne por la parte más gruesa y en diagonal e introduce la bandeja con la carne a altura media.
- Ahora simplemente toca esperar a que la sonda marque 60ºC ya que a esa temperatura interna la carne estaría en su punto. Poco hecha serían 50ºC y muy hecha 70ºC. Prefiero no decir tiempos porque depende del tipo de carne, de su forma y tamaño, de tu horno… demasiadas variables. Si que te diré que lo habitual es necesitar entre 20 minutos y 1 hora.
- Si durante el proceso ves que la zona de arriba se está dorando demasiado (según el horno esto puede ocurrir) puedes darle al vuelta o casi la vuelta pero sin sacar el termómetro o sonda. Si no quieres o no puedes girarlo también puedes cubrir la zona superior de la carne con un poco de papel de aluminio para que no siga dorándose e incluso puedes bajar la bandeja en tu horno a un nivel inferior.
- Mientras se hornea la carne aprovecha para preparar la guarnición. En este caso no he querido quitarle protagonismo y he cocinado un sencillo puré de patatas casero que queda cremoso y muy rico. A la hora de presentarlo le he echado por encima un poco de perejil fresco picado.
- Saca la bandeja del horno y deja la carne enfriar totalmente.
- En la sartén que habíamos utilizado echa los restantes 100 ml de vino Pedro Ximénez, pon el fuego alto y espera un par de minutos para que se evapore casi todo el alcohol.
- Añade los jugos de la bandeja de horno colados y 100 ml de agua y cocina durante un par de minutos a fuego medio.
- Si quieres espesar un poco la salsa, en un recipiente pon media cucharadita de postre de maicena con un poco de agua, disuélvela con ayuda de una cuchara e incorpórala a la sartén, la salsa deberá estar hirviendo. Mezcla durante unos minutos y verás como se espesa aunque si quieres que esté aún más densa repite el proceso con más maicena.
- Prueba la salsa por si necesitas rectificarla de sal.
- Cuando la carne esté totalmente fría ya podrás cortarla, muy importante utilizar un cuchillo bien afilado para poder hacerlo en lonchas finas. Ayúdate pinchando la carne con un tenedor para trinchar para poder sujetarla bien.
Tiempo: 2 horas
Sirve y degusta
El rosbif se sirve frío y loncheado y se acompaña con la salsa de sus jugos caliente y la guarnición que hayas elegido, en mi caso ha sido un puré de patatas cremoso. Lo mejor es cortar en lonchas solo lo que vayamos a comer ya que podemos conservar el roastbeef ya cocinado en la nevera durante alrededor de una semana y así ir cortándolo conforme lo vayamos necesitando.
Disfruta de una carne sabrosa, fina y en su punto, con el toque del fantástico aliño que lleva por alrededor y el puntito que le da el haberse asado en el horno. Servida junto con la cremosa salsa que se prepara con sus jugos está de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
La principal variación es el corte de carne que utilices, ya sea lomo alto o lomo bajo o cadera de ternera.
También puedes innovar con el aliño de la carne, en esta ocasión he utilizado mostaza y hierbas aromáticas pero también puedes prepararlo con aceite de oliva o manteca de cerdo y hierbas y/o especias a tu gusto.
Este tipo de asados combinan fenomenal con elementos dulces y a mi un añadido que me gusta mucho es pelar y picar manzanas, cocinarlas en mantequilla en una sartén y mezclarlas con el puré de patatas, le aportan un toque dulce y aromático fantástico.
Consejos
Es una receta perfecta para dejarla hecha con antelación, ya sean horas o incluso del día anterior. Simplemente mantenlo en la nevera, sácalo un par de horas antes de comerlo para que esté a temperatura ambiente y córtalo en lonchas finas.
Si te sobra rosbif es toda una suerte, lo más típico es utilizarlo para preparar un rico sándwich, es algo muy popular en Inglaterra y se suele acompañar con rábano picante. También queda fenomenal incluir mostaza, rúcula o cebolla caramelizada.