Sopa de miso japonesa con caldo dashi casero. Receta tradicional
Ingredientes para 4 personas
- Para preparar el caldo dashi casero:
- 15 g de alga kombu.
- 20 g de copos de bonito seco o Katsuobushi.
- 1 litro de agua.
- 1 cucharada sopera de alga wakame seca.
- 4 setas shiitake (opcional). Yo he utilizado frescas pero abajo en la sección de Consejos verás cómo utilizar setas shiitake deshidratadas.
- 1/4 cebolleta fresca (tanto la parte blanca como la verde).
- 150 g de tofu blando.
- 3 cucharadas soperas de pasta miso.
Esta receta está basada en la forma más tradicional de prepararla aunque existen varias versiones y a cual más rica. La clave está en conseguir los ingredientes que se necesitan (más abajo en la sección de Consejos te cuento en qué tipo de tiendas se pueden comprar) y preparar primero un caldo dashi casero que es la base de esta sopa y después añadir la pasta de miso y demás ingredientes para completarla. Se trata de una sopa de acompañamiento, ideal para servir en un pequeño cuenco y acompañar una buena sesión de sushi casero o sashimi por ejemplo. Verás en la receta recomendaciones para saber hasta qué punto calentar los ingredientes, que no deben llegar a hervir en ningún momento.
Cómo hacer sopa de miso japonesa con caldo dashi casero
- Limpia los trozos de alga kombu con un paño húmedo para retirar el polvo blanco que suele tener.
- Pon en una olla pequeña 1 litro de agua junto con el alga kombu y enciende el fuego para que esté a temperatura suave.
- Cuando veas que el agua empieza a burbujear un poco y está a punto de hervir saca un trozo de alga kombu, pínchala con un tenedor y si notas que está tierna (se queda la marca del tenedor) aparta la olla del fuego y retira los trozos de alga kombu.
- Echa en el agua los copos de bonito seco y espera 3 o 4 minutos a que se hayan ido al fondo de la olla.
- En ese momento cuela el líquido y ya tenemos listo el caldo dashi con su característico color dorado.
- Echa el alga wakame en un cuenco con agua fría para que se hidrate, en menos de 10 minutos estará lista para usarse.
- Limpia las setas shiitake de posibles restos de tierra con un paño húmedo y córtalas en rodajas.
- Retírale a la cebolleta las raíces y las posibles partes secas de la zona verde, lávala bien y utiliza solo un cuarto. Córtala en rodajas.
- Corta el tofu en cubos.
- Pon el caldo dashi en la olla a fuego medio-suave y echa en él las setas shiitake. Cocínalas durante unos 10 minutos procurando que el caldo al final no llegue a hervir pero que esté a punto de hacerlo.
- Apaga el fuego y echa la pasta miso en un colador.
- Sumérgelo en el caldo dashi y remueve con una cuchara para que el miso pase a través de él y se disuelva bien. Verás que quedan algunos trocitos blancos en el colador, deséchalos.
- Echa en la olla el tofu, el alga wakame escurrida y la cebolleta, enciende el fuego a temperatura media y cuando esté a punto de hervir retira la olla y ya tienes la sopa miso lista.
Tiempo: 45 minutos
Sirve y degusta
Para tomar la pasta de miso correctamente y conservando todas sus propiedades no debe llegar a hervir así que lo ideal es realizar toda la preparación y justo antes de servirlo incorporar la pasta miso y el resto de ingredientes porque no es conveniente recalentarlo después. Igualmente si te sobra sopa de miso puedes conservarla en la nevera 2-3 días pero al calentarla de nuevo procura que no llegue a hervir.
Se trata de una sopa con un sabor bastante particular, suave y reconfortante y llena de ingredientes con diferentes texturas. Disfruta de la ternura del tofu, el aroma de las setas y el sabor de las algas, sin duda alguna es una sopa de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Si no tienes a mano los ingredientes del caldo dashi puedes recurrir a caldo dashi en polvo que suelen vender, no es lo mismo pero es una alternativa sencilla para tener lista esta receta en un momento.
Incorpora otras verduras a tu gusto, por ejemplo setas de otro tipo, un poco de col o repollo (y si es col china pak choi mejor que mejor), puerro en tiritas… lo que prefieras.
Consejos
La mayoría de ingredientes los vas a encontrar solamente en establecimientos de ingredientes asiáticos y, aunque se podrían sustituir algunos ingredientes por otros, lo cierto es que para preparar esta receta y que se parezca un poco a lo que se busca tienes que contar con todos o casi todos los ingredientes. Lo bueno es que además de tiendas físicas también hay muchas tiendas online que los tienen disponibles y a buen precio.
Si las setas shiitake que vas a utilizar son secas deberás rehidratarlas. Para ello, primero lávalas un poco con agua fría y ponlas en un recipiente cubiertas con agua a temperatura ambiente, que no esté muy fría pero tampoco caliente, y durante alrededor de una hora o hasta que estén tiernas. Eso si, deberás poner encima un plato o similar para forzar que queden sumergidas y no floten. Si tienes prisa siempre puedes sumergirlas menos en tiempo en agua templada o incluso caliente, aunque esto puede hacer que pierdan un poco de sabor. Después retírales el rabito ya que suele permenacer un poco duro, y el agua de remojo está tan sabrosa que puedes utilizarla como caldo para añadirlo al de esta elaboración o reservarlo para cualquier otra (una sopa, un arroz, un guiso…).