Tortilla de patatas en Thermomix, con (o sin) cebolla y trucos para cuajarla
Ingredientes para 4 personas
- 600 g de patatas.
- 700 g de agua para trocear las patatas y 100 g para cocinarlas.
- 200 g de cebolla si quieres ponerle. A mi me encanta el toque que le da.
- 6 huevos L.
- 80 ml de aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
Aprende a prepararla en Thermomix, con o sin cebolla, como prefieras. Personalmente me encanta con cebolla y bien cuajada pero abajo en la receta verás que indico todas las formas de prepararla, ya sea sin cebolla o cuajándola poquito en la sartén. Y en cuanto a darle la vuelta a la tortilla, con un poco de práctica y usando una sartén antiadherente y una tapa o plato de mayor diámetro la cosa está bastante controlada.
Preparación, cómo hacer tortilla de patatas en Thermomix
- Lava un poco las patatas, sobre todo si tienen mucha tierra, y pélalas. Si después de pelarlas se han manchado un poco de tierra, lávalas con agua.
- Corta las patatas en cuartos (o por la mitad solamente si son pequeñas) y ponlas en el vaso de la Thermomix.
- Añade los 700 g de agua y trocéalas durante 2 segundos a velocidad 5.
- Viértelas en el cestillo (y si ha quedado algún trozo grande córtalo con el cuchillo) y ponlo bajo un chorro de agua fría para que se limpien bien y se vaya el almidón de la patata, eso hará que se cocinen después sin pegarse unas a otras.
- Pela las cebollas, córtalas en cuartos y trocéalas durante 2 segundos a velocidad 5.
- Pon la mariposa, echa el aceite de oliva y cocina la cebolla durante 5 minutos a 120ºC con giro a la izquierda y velocidad 1. Si no quieres ponerle cebolla, haz lo mismo pero solo con el aceite.
- Añade las patatas ya escurridas junto con los 100 ml de agua y un poco de sal, y cocínalo todo junto 12 minutos a 120ºC con giro a la izquierda y velocidad cuchara.
- Retira la patata y la cebolla ya cocinadas a un recipiente aparte, que sea amplio para que después quepan también los huevos.
- Casca los huevos y ve echándolos en el vaso junto con un poco de sal y mézclalos durante 20 segundos a velocidad 3.
- Vierte los huevos en el recipiente donde están las patatas y las cebollas y mézclalo todo junto.
- Ahora hay que cuajar la tortilla. Utiliza una sartén con un poco de aceite de oliva y ponla a fuego medio.
- Cuando esté caliente echa la mezcla en la sartén y remuévela un poco para que se dispersen todos los ingredientes.
- Cuando notes que se ha cuajado por abajo (puedes comprobarlo moviendo un poco la sartén y viendo que todo va junto en un bloque unido y despegado de la sartén), entonces es cuando debes darle la vuelta.
- Para darle la vuelta coge una tapadera o plato de mayor tamaño que la sartén, cúbrela y ahora vuelca todo el contenido de la sartén en el plato o tapadera, de forma que ahora puedas ver la parte cuajada de la tortilla por arriba. Con cuidado, escurre la tortilla de nuevo del plato a la sartén para que se cuaje por ese lado.
- Ahora el punto lo decides tú. Si prefieres que la tortilla quede un poco líquida por dentro, pon el fuego un poco más fuerte (solo un poco) para que se cuaje rápidamente por fuera y apártala a un plato. Si quieres que quede perfectamente cuajada mantén el fuego muy suave para que no se queme por fuera pero que el interior se cuaje perfectamente. Podrás hacer la prueba con un palillo, introduciéndolo para comprobar cuanto de líquido está el interior.
Tiempo: entre 45 minutos y 1 hora
Sirve y degusta
La tortilla de patatas tiene detalles para todos los gustos y es por eso que se puede servir recién hecha y calentita, templada o incluso fría. Personalmente me encanta la tortilla de patatas reposada y fría, hecha unas horas antes o incluso el día anterior. Eso va unido a que me gustan totalmente cuajadas, ya que si la quieres a medio cuajar o bastante líquida lo ideal es que la consumas nada más prepararla.
Con o sin cebolla, más o menos cuajada, recién hecha o reposada, la tortilla de patatas es una auténtica delicia y se puede tomar de aperitivo con tenedor, en plan pincho de tortilla, es ideal para almorzar en bocadillo y por supuesto como entrante o incluso cena sencilla. Sea como sea, siempre está de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
La versión clásica es la que has visto pero a mi me encanta experimentar y te animo a ello. Por ejemplo puedes utilizar cebolla caramelizada con Thermomix, le aporta ese ligero toque dulce que le queda fenomenal, y también puedes incluir otras verduras como pimiento verde, calabacín o berenjena.
Aromatízala añadiendo especias o hierbas aromáticas a tu gusto, por ejemplo un poco de pimentón dulce, comino, curry, orégano, tomillo, romero o albahaca.
También puedes cortar las patatas y la cebolla como siempre has hecho y directamente ponerlas en la Thermomix para que se cocinen pero no para que las trocee. A mi me encanta cortar las patatas en 4 partes y después ir haciendo rodajas de cada parte, y las cebollas por la mitad y en tiras finas, como puedes ver en la fotografía.
Consejos
La clave para hacer la tortilla es el control de la temperatura del fuego. Para no equivocarte lo mejor es que lo mantengas medio-suave para que se cuaje poco a poco y, sobre todo, que no se te queme, ya que es lo único que no podrás arreglar. Eso si, si la quieres poco cuajada deberás tener el fuego un poco alto para que, en cuanto la primera capa de huevo se cuaje, darle la vuelta.
Quítate el miedo a darle la vuelta a la tortilla! Con una tapadera firme o un plato, siempre mayores que la sartén utilizada (este suele ser el problema habitual porque utilizar un plato más pequeño es un desastre), no tendrás ningún problema para darle la vuelta y cuajarla perfectamente por ambos lados. La cosa se complica un poco cuando quieres una tortilla poco cuajada por dentro, simplemente porque estará más bailonga y chorreosa, pero no hay nada como practicarlo un poco hasta conseguirlo.